Al menos 35 personas murieron en una seguidilla de atentados cometidos en las últimas horas en varias ciudades iraquíes, en una renovada escalada de violencia que suma más de 360 muertos desde comienzos de julio.
Los atentados más sangrientos se perpetraron en Kerbala, Mussayab, Nassiriya y Bassora, poblaciones de mayoría chiíta, y en la provincia sunnita de Ninive.
En Mussayab un kamikaze hizo explotar su vehículo en las adyacencias de una mezquita y murieron cuatro personas, informó la policía.
En Kut City la explosión de una coche-bomba causó otras cinco víctimas mortales. En la ciudad de Bassora se contabilizaron otros ocho muertos despuís de la explosión en cadena de tres bombas artesanales.
Otro vehículo explotó en Nassiriya, provocando tres muertos. La policía tambiín informó de cuatro víctimas en Kerbala, a causa de un atentado.
Otros 11 muertos causó una seguidilla de atentados perpetrados en la provincia de Ninive, de mayoría sunnita y cuya capital es Mosul, donde murieron cinco personas al estallar un coche-bomba.
Entre las víctimas figuran un miembro del Consejo Regional y uno de sus hijos.
Desde comienzos de julio, los muertos a causa de los atentados son al menos 360 y desde inicios de año se contabilizan 2.635 víctimas mortales.
Fuente: c3m.com.ar