En una rueda de prensa junto a su par venezolano Elias Jaua, el canciller ruso, Serguei Lavrov, se manifestó en contra del paquete de sanciones que aprobó la Cámara de Representantes contra el gobierno de Nicolás Maduro por la represión a marchas opositoras.
"Todos los problemas de un país deben resolverse de forma constitucional, sin ninguna injerencia externa, ni siquiera bajo forma de sanciones o amenazas de sanciones", declaró el jefe de la diplomacia de Moscú. "Hemos ratificado nuestra solidaridad con el gobierno de Nicolás Maduro en su empeño de superar ciertas dificultades de Venezuela y de entablar un diálogo con la oposición", agregó.
En caso de que el presidente estadounidense, Barack Obama, otorgue su aprobación definitiva al proyecto republicano, se hará efectivo el congelamiento de activos y la denegación de visados a funcionarios chavistas.
Las protestas iniciadas en febrero contra el presidente Maduro, que han dejado 42 muertos, han menguado últimamente, aunque la tensión persiste por el congelamiento del diálogo entre el Gobierno y la oposición.
Rusia y Venezuela, en los últimos años, estrecharon sus vínculos económicos, políticos y en materia de defensa. El acercamiento se inició durante la presidencia de Hugo Chávez y prosiguió con su sucesor y heredero político, Nicolás Maduro. Los dos países se convirtieron en aliados diplomáticos. Venezuela, enfrentada con Estados Unidos, expresó su respaldo a Rusia frente a los países occidentales en la actual crisis de Ucrania.
Fuente: c3m.com.ar