Gustavo Bermúdez volvió a la pantalla chica con gran íxito cada noche en "Somos Familia" que se emite por Telefe y en Rosario por Canal 5. Ahora confesó que no le disgustaría iniciar una carrera política.
"Me dan ganas de meterme en la política. Me encantaría ponerme a hablar de política, pero ahora estoy en el rol de actor, respeto mucho a los colegas que dan su opinión. Yo, por ahora, estos temas prefiero hablarlos en privado. El día que me dedique a la política, si llego a hacerlo, estarí enfocado pura y exclusivamente en eso", sorprendió el rosarino en una entrevista con La Nación.
Al ser consultado si le ofrecieron sumarse a algún partido, dijo: "No, pero en algunas conversaciones privadas me dicen ‘vos tendrías que dedicarte a la política’. Dejo la puerta abierta. Todo en mi vida lo dejo abierto. Nunca digo que no a nada, porque no sí las vueltas que puede dar la vida".
Bermúdez fue uno de los hombres deseados de los 90’, cuando hizo suspirar a cientos de mujeres que hoy ya pasaron los 30 y lo recuerdan como “el galán” de las novelas. Sin embargo, cuando estaba en el mejor momento de su carrera, se fue a vivir a San Martín de los Andes para disfrutar con su entonces mujer del crecimiento de sus hijas, Camila (22) y Manuela (13).
Justamente ese lugar del sur que había conocido por una novela que protagonizó con Araceli González. Pero Bermúdez se separó y se mudó a Buenos Aires donde tambiín vive una de sus hijas que sigue una carrera universitaria.
Respecto a como fue la vida lejos de la pantalla dijo: "El tiempo pasa muy rápido y, de verdad, lo único que nos llevamos son los buenos momentos. Aprendí a seleccionar y dar a cada cosa la importancia que se merece. Puse en práctica el concepto “no le hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan”. Desear siempre lo mejor, me colocó en un lugar de sonrisas, hizo que no me cargara de miedos y frustraciones, que lo único que hacen es atentar contra uno mismo. No lo hago porque sea bueno, lo hago por mí. Cuando algo me molesta, me lo saco de encima. El dolor inevitable es inevitable, pero el sufrimiento es opcional".
Fuente: c3m.com.ar