El gobierno nacional impulsará una ley automotriz-autopartista para promover el desarrollo sustentable de proveedores locales y una alta integración nacional en el sector, a partir de la incorporación de un bono electrónico de crédito fiscal como incentivo principal, lo que buscará potenciar las inversiones y la generación de puestos de trabajo de la industria.#
Los detalles de la ley fueron repasados esta tarde durante una reunión que mantuvo el ministro de Producción, Francisco Cabrera, y el secretario de Industria, Martín Etchegoyen, junto al jefe del Bloque Justicialista y autor del proyecto de ley original, el diputado Oscar Romero, y el secretario General del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), Ricardo Pignanelli.
Cabrera destacó la necesidad de "trabajar juntos en forma rápida y enérgica para concretar este proyecto y lograr que la integración de autopartes nacionales sea un hecho y no una expresión de deseo, como ha sido hasta ahora. Así el sector será más competitivo y se generará empleo de calidad, que es nuestro objetivo principal".
Tras el encuentro, Etchegoyen explicó a Télam que el proyecto que contempla a las terminales, proveedores del sector y autopartistas, "tiene como incentivo principal un bono electrónico de crédito fiscal para el pago de impuestos nacionales por un monto proporcional al valor de compra de autopartes locales" y prevé que por cada punto de incremento en la integración nacional el beneficio aumentará 0,6 puntos.
"El objetivo es aumentar la participación de autopartes nacionales que se fabrican en el país y lograr escala para que las empresas tengan mayor inserción internacional" explicó el secretario de Industria al detallar que en el caso de los autos a partir del 30 por ciento de participación nacional de componentes el beneficio va aumentando hasta los 15 puntos cuando se llega a una integración local del 48 por ciento.
La iniciativa oficial prevé generar "un horizonte de mediano y largo plazo para que las automotrices incorporen un mayor nivel de producción nacional y a las autopartistas hacer sus inversiones para responder a los requerimientos de una mayor demanda" para lo cual el Gobierno propone un programa a 10 años con un revisión al promedia el período.
El esquema contempla que en términos de desarrollos locales las terminales deben realizar con sus proveedores la transferencia de tecnología, de normas técnicas y de calidad, y de procesos que demandan trabajos de meses a años de desarrollo.
"Más que objetivos anuales de integración, la idea es proponer un incentivo para que las empresas automotrices incorporen lo antes posible mayor autopartes locales y obtener, así, más rápido obtienen el beneficio", agregó Etchegoyen al referirse al proyecto que el ministro Cabrera impulsó el gremio Smata, las terminales automotrices nucleadas en Adefa, las empresas autopartistas de Afac y las metalúrgicas de Adimra.
Para el secretario, la ley que el Gobierno espera poder lograr el consenso en el Congreso para su aprobación antes de la finalización del semestre "promoverá la concreción de muchos proyectos que están en cartera de las empresas autopartistas y automotrices y la generación de un entorno que permita hacer nuevas inversiones" con el consecuente impacto en el empleo y la balanza comercial.
La iniciativa que se someterá al debate legislativo abarca la producción de automóviles, utilitarios, camiones, chasis con y sin cabina y ómnibus, y podrán presentar proyectos los fabricantes de motores y cajas de transmisión, entre otras autopartes.
Los bienes que integren procesos de forja y fundición de metales ferrosos y no ferrosos tendrán un beneficio adicional del 5 por ciento sobre lo establecido, aplicado únicamente sobre el valor de dichos procesos.
Para aplicar, las empresas deberán fabricar bienes con un contenido mínimo nacional del 30 por ciento, y objetivos de integración del 50 por ciento, considerando el valor de componentes nacionales sobre el total de autopartes.
No obstante, está contemplado reducir temporalmente este requisito en función del impacto económico, productivo y tecnológico de los proyectos, por ejemplo, en el caso de sistemas de autopartes de alta tecnología, que actualmente no se producen en el país.
La iniciativa prevé la posibilidad de otorgar un anticipo del bono, de hasta un 20 por ciento del proyecto total, para el desarrollo de proveedores y la compra de herramentales, moldes y matrices en el mercado local, y también promueve inversiones para nuevas plataformas exclusivas a nivel Mercosur, así como el rediseño de las existentes, que lo requieran.
Fuente: c3m.com.ar