La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, defendió los cambios en la política de Migraciones que lleva adelante el Gobierno, al sostener que no responden a un problema con los inmigrantes sino que apuntan a combatir el narcotráfico y el contrabando.#
"Son cambios que ya se van a ver, pero son cambios muy importantes tanto en el control tecnológico como en el control humano", apuntó en una entrevista publicada por el diario El Tribuno, de Salta, en la que negó que el Gobierno nacional piense en levantar un muro en la frontera con Bolivia.
"Nuestro problema con la frontera no es la gente, nosotros no tenemos un problema con la inmigración, tenemos un problema con el narcotráfico y con el contrabando", subrayó Bullrich al indicar que se instalarán centros de control fronterizo "con alta tecnología" en La Quiaca (Jujuy), Aguas Blancas y Salvador Mazza (Salta) y Puerto Iguazú (Misiones).
Afirmó que el mayor control de las migraciones en pasos fronterizos no provocará un brote de xenofobia "porque es muy importante combatir un delito como el narcotráfico".
"Y en esa realidad, tenemos que encontrar todas las vías para evitarlo. En el delito de la narcocriminalidad, todas las vías son importantes. La vía de expulsar rápidamente a los extranjeros que entren y que delincan en temas de narcocriminalidad, es lo mismo que meter rápido presos a los argentinos que lo hacen", agregó.
"En este tema prácticamente están de acuerdo todos. En realidad este debate no lo arrancamos nosotros, lo arrancó el presidente del bloque de senadores del Frente para la Victoria, Miguel Pichetto", indicó Bullrich.
En ese sentido, dijo que el gobierno estaba estudiando cambios en los controles de Migraciones en momentos en que Pichetto "permanentemente" planteó "que era necesario que Argentina tenga estándares internacionales en relación con el tema del delito".
"Argentina no tenía online los datos de todos los prófugos del mundo, siendo un país que tiene oficina de Interpol hace años", remarcó la ministra de Seguridad.
Vale recordar que, la semana pasada, Bullrich sostuvo que el objetivo de su gestión es reducir "la concentración de extranjeros que cometen delitos de narcotráfico" y precisó que a Argentina llegan "peruanos y paraguayos que se terminan matando por el control de la droga".
Estas declaraciones le valieron el rechazo del gobierno boliviano, que consideró que las apreciaciones de la ministra coinciden con el "discurso xenofóbico" del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En este marco, convocaron al embajador argentino en el vecino país para brindar explicaciones.
Fuente: c3m.com.ar