El medio de un operativo de seguridad sin precedentes, que el gobierno nacional comenzó a desplegar ayer para custodiar la Cumbre del G20, que arranca mañana en Buenos Aires, comienzan a llegar al país los primeros líderes mundiales. Hizo punta el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman (pisó territorio nacional a las 7.20 de ayer), quien fue seguido por el presidente de Francia, Emmanuelle Macron (poco antes de las 21). Se esperan más arribos en las próximas horas.
El arribo del príncipe saudita se produce en el marco de las acusaciones por la muerte de un periodista del Washington Post y por lo cual la organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) lo acusó de cometer un crimen de lesa humanidad y pidió que se abra una investigación en Argentina. La denuncia quedó a cargo del juez federal Ariel Lijo y del fiscal González, quien debe resolver si pide impulsar la pesquisa.
La medidas de seguridad que comenzaron a desplegarse ayer para la cumbre estarán acompañadas por un blindaje "por aire, tierra y agua" de las zonas en las que se movilicen las comitivas de los países participantes, el decreto de feriado para la ciudad de Buenos Aires el viernes 30 y corredores seguros para el traslado de los mandatarios, que incluirán zonas de restricción en distintos barrios porteños.
Otra clave del operativo es el acuerdo al que arribó ayer el gobierno con las organizaciones sociales que marcharán mañana por la tarde en repudio al encuentro y por el cual se convino que la protesta principal se desarrolle desde la avenida 9 de Julio y San Juan hasta avenida de Mayo, para desde allí dirigirse al Congreso.
Además, el Ejecutivo pidió que la movilización se desarrolle "sin caras tapadas" y "sin elementos o artefactos que tengan por objeto la violencia". Advirtió que en caso de "situaciones que pongan en riesgo la seguridad de las personas, los bienes públicos y/o privados, las fuerzas de seguridad actuarán de manera inmediata".
Así se lo comunicó formalmente ayer el secretario de Seguridad de la Nación, Gerardo Milman, a las organizaciones que conforman la denominada Confluencia Fuera G20 FMI.
Comenzaron a instalarse las primeras vallas de seguridad en las seis zonas de restricción, también llamadas "anillos de seguridad", en los barrios de Recoleta, Retiro, Puerto Madero y Palermo Chico, además de Costanera Norte y la estación de Constitución.
La custodia de estas áreas estará a cargo de 22.000 efectivos de las fuerzas federales (Policía Federal, Gendarmería, Prefectura, Policía Aeronáutica) de la Policía de la Ciudad y de la provincia de Buenos Aires, además de unos 2.800 agentes de tránsito que dispondrá el gobierno porteño para desviar a los autos y colectivos.
Si bien las autoridades que lleguen al país traerán seguridad propia, el gobierno argentino establecerá un comando internacional en el departamento central de la Federal.
En cuanto al uso de nuevas tecnologías, mientras dure la cumbre todo llamado realizado al 911 para denunciar una amenaza de bomba u atentado será identificado de inmediato (a través de su número de Imei (International Mobile Station Equipment Identity, en inglés) y ubicación geográfica) de modo que la Justicia pueda actuar rápidamente.
"La seguridad es uno de los elementos preponderantes en un evento de este tipo, con la presencia de los mandatarios más relevantes del mundo. Será un dispositivo de seguridad potente, fuerte y adecuado al desafío", aseguró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Se calcula que asistirán a la cumbre unos 15.000 integrantes de las comitivas, más unos 3.000 periodistas acreditados de todo el mundo.
Robo y mensaje
Un experto canadiense de la cumbre del G20 denunció ayer que delincuentes lo atacaron mientras caminaba cerca del estadio Luna Park, en el barrio porteño de San Nicolás. Se trata de John Kirton (70), un profesor de ciencias políticas fundador del Grupo de Investigación G20 que participará de al cumbre, reveló que fue víctima del asalto en las últimas horas.
"Paseaba con dos colegas cuando dos jóvenes me atacaron. Los periodistas que visitan Buenos Aires por el G20 no deben desplazarse solos o confiar en que la policía local los mantendrá seguros", advirtió en su cuenta de Twitter.
"Después de 31 cumbres G7, doce del G20 y una de los Brics desde 1988, mi suerte y la seguridad del anfitrión finalmente se agotaron. No llores por mí, llora por Argentina", expresó Kirton.
Se calcula que asistirán a la cumbre unos 15.000 integrantes de las comitivas, más unos 3.000 periodistas acreditados
Fuente: c3m.com.ar