Durante casi tres horas, la comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados debatió el expediente impulsado el año pasado por el entonces senador Aníbal Fernández, en el que pidió "la apertura de un proceso investigativo sobre el Señor Ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Dr Carlos Fayt, a fin de que proceda a evaluarse su capacidad psicofísica actual".
La discusión ocurrió en medio de las recurrentes críticas que distintos voceros del oficialismo, e incluso la propia Cristina Kirchner, han hecho en el último tiempo respecto de las condiciones físicas e intelectuales del magistrado para seguir ejerciendo el cargo, luego de que trascendiera que no estuvo presente en el acto en que fue reelecto Ricardo Lorenzetti al frente del supremo tribunal.
En la sesión, cargada de cruces por el procedimiento y la intención de la iniciativa, el Frente para la Victoria consiguió hacer valer su mayoría en la comisión y avaló la texto. No obstante, aclaró una vez más que no era su intención someter al juez, de 97 años, a un juicio político.
Tal como adelantaron en la previa, los bloques opositores se resistieron al tratamiento de ese u otro proyecto de similar naturaleza. El compromiso había sido asumido por Juan Carlos Zablaza (Partido Socialista), Carla Carrizo (Suma+ ECO), Federico Pinedo (Unión Pro), Pablo Tonelli (Unión Pro), Manuel Garrido (UCR), Oscar Martínez (Frente Renovador) y Mario Negri (UCR).
Pasadas las 17, la titular de la comisión, Anabel Fernández Sagasti, anticipó que el debate se prolongaría hasta la noche. Y de inmediato, al ceder la palabra al primer opositor, Pablo Tonelli, se dieron las primeras discusiones.
"El expediente, la presentación del ex senador Aníbal Fernández no es una denuncia de juicio político, sino que simplemente consiste en una diligencia. Al no existir una denuncia de juicio político, la comisión es incompetente", dijo.
Las palabras motivaron la intervención de algunos oficialistas. Al cabo de unos segundos de cruces, el diputado del PRO aclaró que no admitía interrupciones. "La única imputación que se le hace a Fayt es la de ser viejo. Y ser viejo no es una causa que estí prevista para iniciar un juicio político", añadió.
A su turno, Alberto Assef hizo un planteo similar y habló de "embate" contra la Corte. Mientras, el radical Negri lanzó: "Esto es una parodia, es una vergüenza institucional".
"El oficialismo utiliza el eufemismo "proceso investigativo" haciendo de goma el reglamento, porque no se animan a llamar las cosas por su nombre: están haciendo una caza de brujas", opinó luego Manuel Garrido (UCR).
En tanto, los representantes del oficialismo defendieron lo que definieron como una necesidad de evaluar la salud de Fayt. "La ley establece la edad de jubilación para todos los trabajadores, porque es obvio que a medida que avanza la edad se van reduciendo las facultadas. Hay datos que indican que íl no estaría en condiciones de cumplir sus funciones", apuntó Luis Cigogna. "La objeción no es que firmó en su casa. Es que el señor Lorenzetti le hizo decir cosas que no dijo. Habló de que hizo propuestas en una reunión, algo que era imposible porque no estaba. Nadie está imputándole al Fayt una actuación incorrecta", concluyó.
En medio de las acusaciones, el magistrado hoy no asistió al edificio donde funciona el tribunal.
Fuente: c3m.com.ar