Un nuevo ajuste se aproxima desde el primer día de septiembre, ya que el gobierno nacional oficializó este viernes los aumentos en los servicios de gas y electricidad, que serán del 4% en promedio.
El objetivo es evitar que la devaluación mensual y la inflación erosionen las fuertes actualizaciones tarifarias realizadas de la primera parte del año, que permitieron bajar el gasto en subsidios.
Con las subas aplicadas, los usuarios de altos ingresos (N1), industrias y comercios de todo el país, pagarán, en promedio, el 72% del costo del gas y el 90,5% de la electricidad.
En tanto, los hogares de ingresos medios (N3) pagarán el 32% del valor del gas y el 40% de la generación eléctrica, mientas que los usuarios de bajos ingresos (N2), el 26% y 25%, respectivamente.