La jefa de la policía provincial, Emilce Chimenti, afirmó que pone “las manos en el fuego” por su hermano Cristian, en quien confía plenamente. El hombre fue separado de su cargo en la sección Criminalística por una investigación sobre supuesto hurto de armas incautadas por la Justicia, artefactos que fueron vendidos a civiles. Por ese caso, hay un policía de la división Balística imputado y con prisión preventiva y también otras dos personas que tenían en su poder o habían adquirido las armas.
La máxima autoridad de la policía de Santa Fe fue consultada este miércoles sobre la situación de su pariente, que hasta esta semana se desempeñaba como responsable de la sección Criminalística en la zona sur de Santa Fe, organismo del que depende la división Criminalística en donde la justicia detectó a un efectivo que vendió armas a cambio de una moto.
Chimenti aclaró que en la investigación por la sustracción de las armas “por el momento ninguno de los 30 efectivos que son investigados está imputado, excepto la persona que quedó detenida y que se comprobó que cambió armas por una moto. Eso fue una locura, fue una situación muy grave”.